jueves, 28 de octubre de 2010

Los que ríen, los que lloran

Estoy golpeado, no voy a negarlo, y cuando me siento así generalmente me pongo a cuestionar los planes de Dios. Ayer sin ir más lejos miraba el cielo preguntando - ¿Dónde está la coherencia de tu Plan que dejás vivir al sátrapa riojano con kilómetros de cocaína inhalada y te llevás al hombre que nos devolvió la esperanza? -

¿Cómo conocemos? ¿por los frutos? ¿por los diarios? ¿por los que hoy festejan? ¿por los que hoy sufren?

Siempre he creído que lo que realmente vale la pena cumple al menos dos condiciones: trasciende el paso del tiempo y se mantiene fiel a si mismo. Yo reconzco a Néstor Kirchner porque ...

... levantó la voz en la asamblea plenaria de la ONU para decir lo que yo hubiera querido decirles a las entidades de crédito internacional cuyas recetas nos quebraron: incompetentes (que queda mucho mejor que "corruptos" o "cómplices de la corrupción"; esa fué la primera vez en mi vida que me sentí representado)

... clavó bien hondo en la tierra cada una de las banderas que enarboló sin renunciar a sus convicciones (me quema recordar aquello de la "revolución productiva" seguido del desmantelamiento total de la industria nacional, o aquello otro de "conmigo $1 = U$D 1" seguido del corralito financiero, o - a más abundar - "el que depositó dólares recibirá dólares" (sonaba más bien como "Tólares") que terminó en la confiscación brutal del ahorro privado y más lejos en el tiempo aquello de "la casa está en orden" que derivó insospechadamente en las leyes de obediencia debida y punto final

... lo lloran los pobres de siempre, los jubilados, los emprendedores que volvieron a abrir las persianas, los que volvieron a pensar en el futuro, los que recuperaron su casa o la tuvieron por primera vez, los trabajadores, los jóvenes que nos quedaron después del exilio masivo, los enfermos, los discapacitados, los familiares de los muertos durante la dictadura, las víctimas que sobrevivieron, los que volvieron del exilio forzoso, los que creemos en la justicia y convivimos tantos años con la vergüenza de la Corte adicta del menemismo, los que somos de aquí, los que llevamos el azul y blanco en el corazón

... hoy ríen los poderosos, los que escribían "viva el cáncer" en los ´50, los estancieros que quieren retrotraer la situación a 1850, los explotadores, los nostálgicos del 1 a 1, los acomodados, los beneficiarios sempiternos del Estado ausente, los que llevan barras y estrellas en el corazón

Lo reconozco porque los que lo lloran somos muchos mas.

¡Hasta siempre Presidente!

viernes, 8 de octubre de 2010

2001 - 2010

"El sentido es donación de sí" dijiste ... Yo digo

La verdad sola y una en su podio se entrona
esquiva por seguida, por negada presente
y rara vez se muestra como amable anfitriona
al común de la gente.

Dios, primera razón de lo creado y su causa
y árbitro inconmovible de saberes velados
desde siempre y por siempre, sin mutar y sin pausa
nos gobierna callado.

La ciencia hecha hilado de principios rectores
a cubrir no llega la duda necesaria
acaso sea por eso que en paños menores
van sus leyes precarias.

La palabra acuñada en su afán queda trunca
de encerrar en el son de su nombre cada cosa,
la palabra rosa jamás fue ni será nunca
lo mismo que la rosa.

Yo no tengo más credo que el evangelio tuyo,
catecismo brutal de entregas encendidas
y ese don de sí mismo, de la vida, de suyo,
es en mi tu medida.


Feliz aniversario Tana.